Se trata de un CD con temas candentes y calientes. Distintos ritmos. La misma temática. Pega (y vaya que lo hace). Es moda (ojalá que pase pronto). El título dice mucho. También pudo llamarse: “Atrapados”.
Y los intérpretes: “Divididos”
Produce satisfacción
escuchar diagnósticos precisos
cuando acudimos al CLERA los indecisos.
No sé de discursos largos
ni de números precisos
lo que si ví
que empezó con parcelas
y hoy son campos con tranqueras.
Narra lo que pasó
-que por suerte y éxitos no fue poco-
puede llevar
escritos de varios rollos
y todo se sintetiza
con la palabra desarrollo.
Por diversas circunstancias
dicho término quedó postergado
defendamos el mercado
para que al menos
quedemos estabilizados.
Parece una disparatada:
la sabia naturaleza
hasta ahora nos viene
salvando la parada.
Los de gramaje chico ya fueron
los de mediano ya son magos
y a los peso pesados
el queso se lo movieron.
A algunos exportadores
no sé qué los anima
parece que el miedo los aglutina
seducidos por la misma mina.
Erraron el año pasado
al salir con bajos precios temprano
ahora arrancaron
directamente de contramano.
Escuchamos decir que somos
formadores de precios
cuando nos hablan de números
parece que lo fijaron con desprecio.
Viéndolo a la distancia
parece un tema fácil
como de hombres y mujeres se trata
no sé qué carajo pasa.
¿Piensan los responsables
aunque sea por extrapolación
que están poniendo en peligro
la economía de una región?
Es fácil arrojar piedras
y guiñarnos los ojos
distraídos nos hacemos
sabiendo que con nuestra acción
convalidamos la ocasión.
De marketing escucho mucho
el tema me interesa
lo que no entra en mi cabeza
es la forma como se vende
y tengo la leve impresión
que el precio virtual
está produciendo jirones al real.
Hoy el problema es el precio
mañana será el mercado
porque todo se encamina
hacia el valor agregado.
El tema, señores, es serio
obremos en consecuencia:
inteligencia, renunciamiento,
solidaridad, equilibrio e ingenio
estimo que puede enaltecer
nuestra existencia.
No quiero ser alarmista
ni pájaro de mal agüero
pongamos cojones ahora
para no llorar luego.
Pido perdón señores
soy un tipo de pasiones
al que lo desbordan
las preocupaciones.